¿Qué es y como meditar?
Hay muchas personas que tienen dudas acerca de si están meditando correctamente, otras que no saben bien como meditar e incluso algunas se sienten frustradas porque piensan que están meditando mal. Esta entrada del blog surge con la idea de poner un poco de luz en este asunto.
Meditar es una palabra que se usa mucho en el "mundillo espiritual", pero no siempre se entiende lo mismo al usar este vocablo. Según la RAE meditar es "pensar atenta y detenidamente sobre algo", pero seguramente eso no es lo que hacemos antes nuestra clase de taichi, al finalizar la de yoga o en nuestro entrenamiento de mindfullnes.
En realidad hay muchas maneras de meditar, y todas son la correcta y están bien, solo que tienen objetivos y metodologías diferentes. Sin embargo lo que tienen en común es brindarnos la oportunidad de tener un momento de recogimiento y autoconocimiento.
La manera mas básica de meditar es relajarse y observar nuestra respiración o sentir nuestro cuerpo. Otras personas meditan usando visualizaciones de todo tipo. Otra manera de meditar es centrar la mente en un punto, por ejemplo, un mantram o una palabra. También podemos meditar en cada acción cotidiana viviendo plenamente el momento presente, muchas personas meditan de esta manera de forma espontánea y natural, por ejemplo al escuchar música, tocar un instrumento o dar un paseo por el bosque.
También hay quien medita con la práctica de la no identificación con la mente, dejando que los pensamientos pasen sin prestarles atención. Este método en concreto produce frustración en muchas personas, ya que algunas propuestas en este sentido nos hablan de dejar la mente en blanco, o incluso llegar a no tener pensamientos. Desde mi punto de vista la mente no puede pararse, es como si pretendieramos parar un pulmón o el corazón. La maravillosa función de la mente es pensar, y a eso se dedica. Es nuestra falta de entrenamiento y atención lo que hace que nos enredemos con los pensamientos. Lo importante no es el resultado, sino el intento, que en si ya es un triunfo y poco a poco, con humildad y paciencia todo se logra.
Como vemos hay diferentes maneras de meditar, ninguna es mejor que otra, o la autentica meditación, sino que cada una responde a un objetivo distinto. Por lo tanto a la hora de elegir un método de meditación debemos tener claro que es lo que pretendemos: relajarnos, entrenar nuestra mente, programarla, intentar no hacerle caso, etc...
El simple hecho de dedicarse unos minutos al día a uno mismo, en quietud y recogimiento ya es todo un logro que seguro que nos cambiará la vida, así que ¡ánimo!, a meditar.
Os dejo una divertida y simple herramienta de meditación:
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